En este relato se trata el caso de una alumna de un colegio que fue drogada por uno de sus compañero con GHB, una droga que utilizan mucho en los refrescos y hace que la persona se sienta desinhibida y sensual, pero puede llegar a darles una taquicardia.
Felipe busca ayuda para su amiga Jennifer que está al borde del desmayo, llega la ambulancia que pregunta si se ha drogado y todos miran a Felipe que no sabe que contestar, el dice que no, que tal vez comió algo que le hizo daño y llamó a su tía Beky que llegó con su hija Itzel , también llegaron sus padres todos asustados sin saber qué hacer ni que decir.
Cuando el médico les dijo que estaba drogada, no lo podían creer, Jennifer era una muchacha sana.
La droga que tomo era un liquido sin color ni sabor, sintetizado a partir de una sustancia química con la que se limpian circuitos eléctricos, algunos le llaman “éxtasis liquido”, como no se sabe cuál es la dosis perfecta y en cada persona tiene efectos diferentes lo que le pasó a Jennifer la dejó al borde de la muerte y todos le echan la culpa a Felipe que es el que estaba con ella en el momento del ataque, él se queda pasmado pues nunca ha utilizado drogas
A partir de ese momento comienza una búsqueda de la persona responsable del estado de Jennifer, arriesgando su propia vida, yendo a antros y de esta forma descubre otra cantidad de drogas que ni sabía que existieran.
En su búsqueda de la verdad se encuentra en una tienda de piercings, hasta ahí llegaron preguntando ya que Jennifer se puso uno ahí. Estando en este lugar casi obligan a Felipe a perforarse, mientras que perforaran la lengua de a una compañera de Jennifer que quería saber también la verdad de lo que pasó, él escapa de allí con una chica que le dijo que no se hiciera eso, que ella también estaba arrepentida.
Cuando el médico les dijo que estaba drogada, no lo podían creer, Jennifer era una muchacha sana.
La droga que tomo era un liquido sin color ni sabor, sintetizado a partir de una sustancia química con la que se limpian circuitos eléctricos, algunos le llaman “éxtasis liquido”, como no se sabe cuál es la dosis perfecta y en cada persona tiene efectos diferentes lo que le pasó a Jennifer la dejó al borde de la muerte y todos le echan la culpa a Felipe que es el que estaba con ella en el momento del ataque, él se queda pasmado pues nunca ha utilizado drogas
A partir de ese momento comienza una búsqueda de la persona responsable del estado de Jennifer, arriesgando su propia vida, yendo a antros y de esta forma descubre otra cantidad de drogas que ni sabía que existieran.
En su búsqueda de la verdad se encuentra en una tienda de piercings, hasta ahí llegaron preguntando ya que Jennifer se puso uno ahí. Estando en este lugar casi obligan a Felipe a perforarse, mientras que perforaran la lengua de a una compañera de Jennifer que quería saber también la verdad de lo que pasó, él escapa de allí con una chica que le dijo que no se hiciera eso, que ella también estaba arrepentida.
Preguntó que si ella conocía a Jennifer, ella le dijo que no y él le contó que ella había muerto la noche anterior por una sobredosis.
Así continua buscando y encontrando apoyo en personas que le explican por qué no debemos refugiarnos en la droga, que la vida es hermosa sin estas ayudas extras.
Así continua buscando y encontrando apoyo en personas que le explican por qué no debemos refugiarnos en la droga, que la vida es hermosa sin estas ayudas extras.
En resumen, es un libro bien interesante, que todos los jóvenes deberían leer, para tratar de evitar caer en pie de guerra.
Christian Pérez Carreira.
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